Cuáles son las enfermedades de fin de ciclo que pueden afectar a la soja

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Falta poco para que comience la cosecha de la campaña gruesa en las principales regiones productivas del país. Si bien, en el norte argentino ya han comenzado las labores de trilla, se espera que en semanas la actividad cobre fuerza en la zona núcleo, área sojera por excelencia.

Las condiciones ambientales de la campaña fueron de menor a mayor, sufriendo el cultivo la falta de lluvias en una primera etapa y logrando recuperarse después en varias zonas, a partir de las precipitaciones registradas. Teniendo en cuenta la proximidad de la cosecha, es bueno considerar algunas enfermedades que pueden afectar al cultivo en el último tramo de su desarrollo.

Las expertas Margarita Sillón y Florencia Magliano, ambas del departamento de Producción Vegetal de la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNL, remarcan que en soja esas enfermedades están ocasionadas por hongos que sobreviven en los restos de cultivos y muchos también en las semillas, por lo que el sistema de monocultivo asociado a la siembra directa favorece su sobrevivencia y dispersión inicial.

Mancha marrón

Desde 2010 la mancha marrón presenta una prevalencia del 100%, es decir que está presente en todos los lotes. El hongo Septoria glycines causa lesiones amarillentas y necróticas en los foliolos. Lo más importante en el progreso de esta enfermedad es el salpicado desde el rastrojo de las estructuras del hongo, que puede ocurrir con precipitaciones intensas aunque cortas, o frecuentes. En años lluviosos se transforma en una epidemia

Mancha marrón está presente en todos los lotes desde hace varias campañas.

Bacteriosis

A raíz de precipitaciones fuertes y vientos ocurridos en diciembre 2019 se han detectado muchos casos de necrosis ocasionadas por bacterias, que aprovechan las heridas de las plantas para ingresar y generar lesiones. El tizón y la pústula bacteriana son dos enfermedades altamente difundidas en el área sojera.

Tizón foliar

Este hongo (Cercospora kikuchii) puede observarse a partir de formación de vainas en soja (R3). Las condiciones que predisponen al ataque de este patógeno son temperaturas cálidas (28°C a 30°C) , elevada humedad y alta heliofanía (días soleados). Ya se encuentra presente en el 50% de lotes sembrados en noviembre en la región.

Mancha en ojo de rana

La mancha en ojo de rana (MOR) esta ocasionada por el hongo Cercospora sojina, y tiene tres fuentes de inóculo: la semilla contaminada, el rastrojo, o las esporas que vuelen desde campos infectados. De esta manera son condiciones que favorecerán el progreso de una epidemia. Se han registrado casos reiterados en el norte de la provincia de chaco para sojas “de primavera”.

Roya asiática

Phakopsora pachyrhizi es un patógeno biotrófico, cuyas esporas de diseminación (uredosporas), son muy livianas y vuelan desde Brasil, donde la gran superficie cubierta con soja, hace que esta enfermedad esté presente desde estados tempranos causando problemas. El hongo requiere para germinar de 6 horas de mojado foliar, o rocío persistente en los cultivos y necesita temperaturas desde 16°C a 24°C. Generalmente, estas condiciones ocurren en Argentina desde marzo en adelante, con lo cual el mayor riesgo lo tienen los cultivos “de segunda y tercera” y aquellos cultivares de ciclo largo (VII y VIII) en la zona NEA y NOA.

Se recomienda actuar con bajo nivel de enfermedad.

Acciones de prevención

El uso de fungicidas foliares como medida de control de enfermedades foliares tiene como objetivo disminuir la tasa epidémica del patógeno, reduciendo el nivel de daño del mismo. Existen distintos principios activos que constituyen mezclas muy eficientes en el mercado, pero la recomendación siempre es la misma: actuar con bajo nivel de enfermedad, para lograr proteger el cultivo cuando el patógeno no ha llegado a su faz exponencial de progreso. Actuar con niveles elevados de enfermedad reduce las posibilidades de éxito y posibilitará la selección de individuos que puedan generar resistencia.

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